El funcionamiento del estado requiere de bienes y servicios, este gasto público está justificado de distintas maneras, pero el punto clave aquí no si estos gastos están correctamente fundados o no, sino la manera de cómo el estado se hace de esos recursos para afrontar esas erogaciones.
Como se menciona en la introducción, el gobierno, a grandes rasgos tiene dos maneras de financiar su gasto, la primera forma es de manera coactiva mediante el cobro de tributos, es quizás la manera más "sana" de financiamiento ya que no requiere ni de impresión monetaria ni la acumulación de deuda con el público lo que implica el pago de intereses.
La segunda manera es mediante el endeudamiento (o sea la venta de títulos públicos), éste, como se había anticipado, se distingue entre el agente con el cual el estado se endeuda, pudiendo ser el sector privado de la economía (particulares, bancos AFJP, etc.) ó el Banco Central.