Números de la Economía Argentina

Conocidos los números del mes de enero, y el dato final del crecimiento de la economía durante 2005, es interesante analizar las perspectivas económicas sobre la base de las opiniones tanto del gobierno como de los especialistas.

La cifra de crecimiento de la economía durante 2005, quedó definitivamente establecida en 9,1%. El valor es de por sí elocuente y eso complica cualquier análisis que pretenda ser crítico, aún en el marco profesional. Sin embargo, sabemos que la recuperación económica luego de la devaluación y de la crisis, ha pasado esencialmente por el expansionismo monetario, los retrasos tarifarios y de los precios de los combustibles, y un reacomodamiento de precios minoristas esencialmente contenido por políticas de acuerdos de precios, retenciones a las exportaciones y en general la utilización del sistema tributario desde un punto de vista punitivo, esto es: sancionar con retenciones a las exportaciones o negar desgravaciones tributarias si no se comportan los precios según la visión oficial. Así las cosas, las listas de precios sugeridos o cuasicongelados acordadas por el Poder Ejecutivo con distintas empresas, muestran a las claras un enorme intervencionismo tendiente a evitar las consecuencias de la devaluación forzada del peso argentino, a estas alturas un 40% más débil que el real brasileño, habiendo partido de una relación uno a uno con esa moneda a comienzos de 2003.

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Con este telón de fondo, comentaremos en este trabajo algunos temas de rigurosa actualidad en materia económica, como ser:

     

  1. Se prorrogará la rebaja del precio de 216 medicamentos por 60 días más a partir del 19 de febrero.
  2. Se ha difundido una lista de 351 productos con precios congelados mediante acuerdos.
  3. La industria creció un 4,8% en enero. El crecimiento es el menor desde la reactivación, y se atribuye desde el gobierno a la parada de plantas por razones técnicas, hecha en enero en el caso de las automotrices, cuando en 2005 se hizo en febrero.
  4. La inversión industrial en 2005 llegó a los 14.105 millones de dólares, de los cuales 9.430 se destinaron a ampliaciones de la unidad productiva o a la creación de nuevas unidades, según informó la Secretaría de Industria. Se menciona en particular la exploración y explotación de nuevos pozos petroleros, que insumió 2.000 millones de dólares.
  5. El ministro De Vido anunció una inversión del orden de los $ 1.000.- millones en los yacimientos carboníferos de Río Turbio hasta 2008. La pérdida de la concesión por parte del empresario Sergio Taselli nunca fue suficientemente explicada
  6. Se ha anunciado el final de la empresa de aviación estatal LAFSA, pese a que existen en el presupuesto 2006 casi 6 millones de pesos destinados a dicha empresa, la que cuenta en la actualidad con 60 empleados.
  7. Se ha mencionado una posible reforma tributaria que implique gravar transacciones financieras. Esta reforma puede afectar a los fideicomisos financieros, que son fuente simple y rápida de financiamiento a bajo costo, y también puede llegar a tocar a los títulos públicos, un aspecto que históricamente los gobiernos han tratado de evitar en lo posible.
  8. Tal reforma tributaria, puede llegar a abarcar otros aspectos, como el mínimo no imponible de Ganancias, el monto exento de Bienes Personales, y cuestiones tales como la tasa de IVA para determinados productos. El presidente Kirchner ha desmentido esta reforma, publicada en el diario Clarín, que como se sabe suele contar con información cercana al gobierno. Cabe suponer que algo habrá, pero no todo.
  9. El Banco de la Nación busca estirar los plazos de las colocaciones en plazos fijos hasta 3 años, recurriendo a tasas supuestamente más atractivas en pesos y en dólares, pero por debajo de la inflación esperada en todos los casos.
  10. Es probable que el gobierno acepte una mayor inflación y un menor crecimiento, dicen los analistas. Esta idea tiene una base lógica: no es posible seguir creciendo al ritmo de los últimos años sin que los precios y los salarios terminen acercándose al incremento sufrido por los precios mayoristas.
  11. El acuerdo con Telefónica ha sido cuestionado por economistas disidentes, se lo ha calificado de poco transparente y en cierto modo es por lo menos llamativo que esta empresa acepte mantener tarifas congeladas sin nada visible a cambio. Se sabe, sin embargo, que el negocio telefónico pasa hoy por la banda ancha y por la telefonía móvil, y que la empresa consiguió extender en forma ilimitada la licencia, además del acceso a otros negocios.
  12. En lo que va del mes, el Central ha comprado más de 580 millones de dólares y algo así como 20 millones de euros para sostener el tipo de cambio en torno de los 3,09 pesos. Este valor es un 7% más elevado que el existente en noviembre pasado.
  13. El crecimiento del PBI esperado para el corriente año, supera el 7% en la visión de los principales analistas, aunque se sostiene que casi un 4% es arrastre de 2005.
  14. En cuanto a la tasa de inflación esperada, algunos la llevan al 15% y otros se mantienen en un valor bastante conservador, cercano al dígito. Nuestra opinión es que la política monetaria sigue siendo expansiva y por lo tanto no será factible evitar que la tasa de costo de vida se aproxime a tal expansividad, de donde deducimos que si la misma es elevada, la inflación será elevada, y eso es lo más probable.
  15. Un dato llamativo publicado por el diario La Nación es que el gasto social es menor hoy que el que había en 1994, según cifras oficiales. El informe del INDEC sobre los que más ganan y los que menos lo hacen, comentado en nuestro anterior trabajo, no ha sido del agrado del ministerio de economía. Y precisamente es allí donde se indica que se gasta un 9% menos que la asignada en 1994 y un 14,3% menos que en 2001. Y también el gasto social está por debajo del promedio de la década pasada.
  16. En el caso de Aguas Argentinas, a diferencia de lo ocurrido con Telefónica, no se ha arribado a un acuerdo, y no existe un operador técnico del sistema. El Gobierno ha impulsado el ingreso de empresarios nacionales, como Eduardo Eurnekian o el Banco de Galicia, pero la inversión es muy grande, de modo que es probable que deba hacerse cargo el propio Estado de tal inversión. Falta saber si finalmente Aguas de Barcelona, u otro, acepta ser el operador técnico.

En términos generales la política de acuerdos de precios continuará a ritmo probablemente creciente. Igualmente el Estado prosigue con la política de subsidios y desgravaciones con el objeto de lograr nuevas inversiones para aumentar la oferta de bienes y servicios. Empresas y empresarios van adaptándose poco a poco a este retorno a viejas prácticas, hoy incrementadas por el superávit fiscal que ofrece al Gobierno y a sus más destacados funcionarios (por el cargo que ocupan) la posibilidad de ensayar modelos de ayuda al mismo tiempo que definir sectores o actividades a ser promocionadas. Es allí donde la práctica del lobby se acentúa y profundiza día a día. Se trata de llegar a los ministros que definen las necesidades y prioridades, para alcanzar luego la ayuda necesaria. Es interesante citar por ejemplo el caso del ferrocarril Belgrano Cargas, incluido en la ley de emergencia económica y que pretende ser reprivatizado a manos de un consorcio integrado por Francisco Macri, empresas chinas, el gremio ferroviario y desde ya el propio Estado. En materia ferroviaria, dicho sea de paso, el incremento de los subsidios ante el retraso evidente de las tarifas, se destina casi íntegramente a sueldos. Asimismo el gasoil se subsidia para evitar que suban los boletos de ómnibus y los fletes. El Estado gasta así dinero en sostener una irrealidad, pero no parece ser el objetivo cambiar la situación con vistas a un mejor servicio en un plazo convenido. No. Simplemente parece tirar para adelante la pelota.

El Estado subsidia la generación de electricidad, dado que fuerza a las empresas a invertir sus acreencias en nuevas usinas necesarias para evitar el colapso. El consumo de GNC no parece preocupar demasiado, pese a su bajo costo y a la necesidad de gas creciente. Y las petroleras en general compensan los altos derechos de exportación y el congelamiento de precios local, con menores impuestos sobre las ventas de combustibles al exterior.

Cuando la política económica se ha vuelto intervencionista en un grado de detalle que incluye que los ministros, el presidente de la Nación, y prácticamente toda la plana ministerial a nivel Nacional y Provincial, más los intendentes y asesores a nivel municipal, está bien claro que la continuidad del sistema será un creciente esfuerzo por negociar y acordar precios, producción, subsidios, desgravaciones, créditos blandos, prioridades, etc. Por otra parte, se multiplicarán los esfuerzos por lograr "canastas" de precios de indumentaria, escolares, básica alimentaria, etc. Todo ello en un esquema de creciente participación política y sindical.

Pronto las acusaciones a empresas y empresarios comenzarán a resultar menos útiles políticamente, ya que la población en general termina depositando en el gobierno, cualquiera fuera éste, la responsabilidad máxima de que las cosas puedan trastabillar o incluso dejar de funcionar. Lo ocurrido en Las Heras muestra a las claras lo que decimos. Llega un punto en que de nada sirve acusar a tal o cual grupo empresario, porque es el Estado el que puede y debe fijar las reglas y establecer premios y sanciones. Más aún, o esencialmente, en un modelo intervencionista y de fijación de precios como el vigente.

Lamentablemente no vemos un horizonte de reglas de juego claras que se respeten en el tiempo y que estimulen el ingreso de capitales por medio de la confianza y la seguridad jurídica. Tampoco vemos un gobierno preocupado por la eficiencia del aparato estatal, que sigue tan pesado costoso y torpe como siempre, o más todavía, siendo la principal causa de la enorme presión tributaria que obliga a la desvalorización monetaria como artilugio de competencia. El proteccionismo también viene recrudeciendo de la mano de cláusulas como la de "readaptación competitiva", o de los permisos de exportación.

Veremos, en este marco, qué deparan los acontecimientos en las próximas semanas.

Buenos Aires, 19 de febrero de 2006

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Como citar este texto: 

Héctor Trillo (19 de Feb de 2006). "Números de la Economía Argentina". [en linea]
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