Es extensa la bibliografía sobre los efectos negativos de las emociones en el trading. Las miradas subjetivas que tenemos sobre el mercado en determinados contextos no hace mas que engrosar nuestras pérdidas. Eso se debe a cuestiones humanas innatas pero tienen su explicación "estadística" de porque genera efectos negativos. Nombrando solo a tres aspectos interrelacionados entre ellos, podemos llegar a algunas conclusiones:
1) Muchos operadores recién iniciados tienden a ingresar en una operación cuando el precio está subiendo (o bajando). Ven una vela verde (o roja) grande y piensan "esto esta subiendo (bajando), hay que comprar (vender)". Puede que algunas operaciones salgan bien pero cuando consideramos varias, probablemente salgan mas la mayoría. Esto se debe a que no ingresamos con buenos precios. A este tipo de acción suele denominarse "corredores de precios".
2) Cuando una operación va resultando bien, suelen cerrarla rápidamente para asegurarse la ganancia. Como este es un mundo de probabilidades, todas las operaciones no van a comenzar de igual manera y cuando tenemos una pérdida probablemente no sea compensada por las pequeñas ganancias que tomamos por asegurarnos el resultado de una operación.
3) Cuando en alguna operación comenzamos a perder, no se colocan stops ni se quiere salir de la posición. Queremos salir victoriosos de esa operación y por lo tanto aguantamos todo lo que sea para que la operación vuelva a su rumbo. Esto nos hace cerrar posiciones con pérdidas enormes, difíciles de recuperar.
Estos aspectos están comprobados por estudios científicos. Dos renombrados científicos israelíes, Daniel Kahneman y Amos Tversky tienen años dedicados al estudio del comportamiento del ser humano cuando este debe tomar decisiones bajo un ambiente de incertidumbre. Sus trabajos le han permitido obtener numerosos reconocimientos, como el premio de la American Psychological Association y en años más recientes el premio Nobel de economía. La teoría económica clásica nos ha enseñado que el sujeto económico es un ser racional que busca maximizar su beneficio y minimizar sus perdidas, actuando siempre bajo parámetros lógicos. Sin embargo, el trabajo de Kahneman y Tversky ha logrado demostrar que la realidad del comportamiento de los inversores es muy diferente, y dista mucho de un comportamiento racional. Veamos de qué se trata todo esto. Esta teoría, que en definitiva representa una indagación sobre la psicología de la incertidumbre, ha tenido como resultado teórico una explicación sistemática para algunos de los aspectos más sorprendentes del comportamiento humano, y encabeza el desarrollo de una nueva disciplina científica dedicada a los aspectos del comportamiento que se refiere a la toma racional de decisiones. Veamos a continuación un ejercicio práctico que permite ilustrar muy bien estas ideas: Presentamos un conjunto de opciones de inversión, usted deberá elegir entre la alternativa que considere apropiada. Elegir:
A.- Un ganancia segura de 3000 dólares.
B.- Una probabilidad del 80 por ciento de ganar 4000 dólares y un 20% de no ganar nada. Elegir:
C.- Una perdida segura de 3000 dólares.
D.- Una probabilidad del 80 por ciento de perder 4000 dólares y un 20 por ciento de no perder nada.
Muy bien, estas mismas preguntas se han realizado a un grupo extenso de inversionistas y los resultados han sido los siguientes: En la primera situación, como se suponía, la mayoría de la gente tiene aversión al riesgo y por lo tanto prefieren una ganancia segura de 3000 dólares, a pesar de que la alternativa B tiene una expectativa ligeramente superior (0.8*4000=3.200).
Sin embargo en las preguntas C y D, las preferencias se invirtieron. Más del 90 por ciento de los que respondieron eligieron la incertidumbre, arriesgando una gran pérdida por la posibilidad de no perder nada (opción D). Cuando Kahneman y Tversky investigaron con mayor cantidad de ejemplos, persistió el mismo patrón: la gente trata de evitar los riesgos cuando busca la ganancia, pero elige el riesgo cuando se trata de evitar una pérdida segura. Está científicamente demostrado que este principio aparece en muchas situaciones reales.
Un principio básico de la Teoría de Expectativa es que hay algo en la mente humana que aborrece la perdida, al punto que renunciar a una cantidad de dinero, una comodidad o un privilegio, nunca resulta totalmente compensado por una ganancia equivalente. Las perdidas tienden a ser percibidas mayores que las ganancias.
¿Cómo comportarse en el mercado? Aquí describimos un par de conceptos que serán útiles.
Disciplina: Salirse de las reglas, es como dejar que su capital se maneje por el azar. El azar puede llevarte para un lado o para otro. Aunque la experiencia y hechos nos muestran que siempre nos lleva hacia el lado negativo a largo plazo.
Perfeccionista: No existen los sistemas perfectos ni la operación perfecta. La personalidad del perfeccionista no es para el trading. Si usted espera a la operación perfecta puede que pase demasiado tiempo al frente de la maquina sin tomar una decisión. Eso le provoca tensión y estrés que no es sano para enfrentar el dinámico contexto del mercado. El trading esta hecho para aquellos que toman decisiones en momentos oportunos sin miedos, pero de acuerdo a un análisis detallado previo.
Aprender a perder: Las perdidas solo deben considerarse como una vía para las ganancias, pero no debe sobrepasarse en el tamaño de la pérdida. Una operación que va perdiendo debe ser cortada con un stop, si usted la deja correr puede que se transforme en una perdida grande, y en caso de que siga sin detenerla puede convertirse en una perdida enorme. Perder es parte del juego, no existe un traders profesional exitoso que no tenga perdidas. Recuerde george soros, perdía en el 62% de las operaciones pero claro cortaba inmediatamente las pérdidas y dejaba correr las ganancias.
No hay que ganar cada batalla: Perder en una serie de operaciones o días, no significa que usted va a perder la guerra. Debe controlar y medir en todo momento sus resultados y definir si están dentro de las estadísticas o escenarios esperables. Si esto es así debe continuar adelante, si no es así, debe frenar, enfriar las emociones y comenzar de nuevo modificando el sistema o plan o con uno nuevo. Aquí no hay excusas, solo resultados, es por ello que conveniente evitar prejuicios infundados como "el franco suizo no es para mi, nunca le puedo ganar".
El esfuerzo no es una condición suficiente: La cantidad de horas de operación no tienen una relación directa con los resultados, no debe poner en la balanza las horas trabajadas con lo efectivamente ganado, porque de esa manear la ecuación puede verse rota en algunos periodos de perdidas consecutivas y abandonar la profesión antes de tiempo. El esfuerzo debe dedicarse primero al estudio y aprendizaje, para luego si ejecutar lo aprendido entendiendo perfectamente los conceptos.
Impulso: por aburrimiento o por ansiedad, existen personas que necesitan operar todo el tiempo. O que no tienen la paciencia para esperar a que se produzca una señal de acuerdo a sus estudios. Si usted tiene este tipo de personalidad, trate de corregir esos aspectos o no se dedique, ya que tiene altas probabilidades de que no le vaya bien.
Codicia: Hay que saber cuando frenar una operación con ganancia y cuando no. Si dejamos correr las ganancias en exceso, puede que la operación termine en cero o negativa. La extrema codicia puede llevar a este tipo de decisiones. El otro aspecto relacionado es el apalancamiento. Muchos buscan operaciones con alto apalancamiento para ganar lo mas que se pueda en una operación. El problema esta cuando solo una operación sale mal, ahí todo nuestro capital culmina en unos segundos de mercado volátil.
Exceso de confianza: Lo peor que le puede pasar a alguien recién iniciado es que este ganando y no sepa porque esta ganando. Eso lo lleva a tomar decisiones basadas en un exceso de confianza que lamentablemente culmina con el capital del inversor.
Tener razón: En el mercado no se tiene razón o se equivoca. En el mercado se logran resultados sostenibles en el tiempo o no se logran. La absurda "lucha" por tener razón, a veces nos lleva a comprometernos con una dirección como "se que el euro esta alcista, no voy a cerrar mi posición por mas que este perdiendo porque ya va a subir". No tiene sentido la razón, estos mercados son emocionales y cíclicos. Puede que en varias oportunidades alguien acierte la dirección del mercado, pero eso no necesariamente lo hace acreedor de una cuenta ganadores. Opinar es muy distinto a operar.
Conclusión
Ninguno de estos aspectos influirá en nuestro capital si adoptamos estrategias objetivas, si nos abstraemos de querer saber o adivinar todo el tiempo hacia donde va el mercado. Las estrategias objetivas dependen de reglas. Reglas que no nos van a asegurar las ganancias, pero si las seguimos tal cual las creamos, al menos vamos a estar conscientes de como y porque esta avanzando o retrocediendo nuestro capital, y ello nos va a hacer tomar decisiones inteligentes. Pero estamos aquí para ganar y ganar en el mercado depende de nuestro esfuerzo en el constante estudio e investigación y en aprender de los que saben. Las estrategias objetivas son las razones por la que la mayoría de los traders con éxito, salen ganadores en el mercado.
Autor:
Lic. Hernán Hermoso
TodoTrading.net
Programa de Asesoramiento Profesional para Estrategias Forex
Como citar este texto:
Econlink (04 de Abr de 2009). "Psicología". [en linea]
Dirección URL: https://www.econlink.com.ar/forex/psicologia (Consultado el 14 de Mayo de 2021)